El Ineficaz necesitó tan sólo de 10 años para regresarnos a la época de las cavernas, donde el más fuerte es el que manda y la honestidad no compra vestidos caros que escondan la desnudez del Rey. Los arrodillados no miran el mañana, porque lo que les ha dejado pecular jamás lo tendrían en el mundo real.
La estrategia del Ineficaz es tan básica que recurre a intelectos subvencionados que hilvanen teorías acerca de su fina concepción de la vida y del mundo, cuando lo realmente cierto es que no se necesita más de un nanogramo de materia gris para entenderla: corrupción para los éticamente débiles, poniéndolos en posiciones impensables en sus vidas pasadas y dejando que lo demás derive de la codicia.
El plan Bolívar 2000 fue el inicio de la noción de lo fácil, deslastrada de los burgueses conceptos de la superación personal por esfuerzo propio y del ascenso social a punta del estudio. A cambio, impunidad absoluta sin procesados ni condenados. Más fácil no podía ser y hasta un imbécil lo capta al instante, lo asimila e imita.La inteligencia de los ex Pdvsa la engañó el cuento de que "soy indispensable para la institución".
La lección aprendida: a la mente pueblerina del Ineficaz sólo interesaba quitar a unos ingenieros para poner a los bachilleres rojitos, creyendo que el negocio petrolero se aprende mirando.La obra maestra del ingenio retardatario fue vender al gringo comunista de Carter como el aval para un proceso revocatorio prístino.
La estrategia fue tan simple como sobornar a muchos para que cantaran las mañanitas madrugadoras, con el performance -acreedor del Oscar a la mejor distracción- de la CIA y el G2.Ya nadie se acuerda de la separación de poderes y de las loas a la vergüenza ajena de unos señores entogados que presuntamente dirigen la administración de injusticia. Bastaron salarios rellenitos y viajes de placer para el afinamiento vocal.
La otra clave de la sumisión fue enaltecer el ego, haciéndolos creer que ahora con plata, no importaba que fuera mal habida, la sapiencia surgirá cual kit de primeros auxilios.¿Recuerdan los muertos de Puente Llaguno, a los comisarios y policías de la Metropolitana, a Anderson, los centrales azucareros, el desplome de la economía, la ruina del Banco Central? Lo más cirquense: la farsa de la reconversión monetaria que permitió a algunos descubrir los suculentos contratos de servicios.
La violencia callejera es una consecuencia de las improvisaciones del Ineficaz. El odio social se vive en las calles venezolanas, donde todos nos agredimos y ofendemos, el vivo no respeta señales ni fiscales (esta vez sí son de tránsito, no del Ministerio Público), y el crimen está a la espera de una ventanilla abierta, de una puerta más cerrada, o en una buseta llena de apáticos pasajeros sin capacidad de asombro ni de solidaridad.
Las calles de Venezuela son planificadas en la Luna. La gente se preocupe de las aguas negras que se le meten al rancho, y no del robo de los dineros públicos. Sólo así entendemos cómo hay alcaldes y gobernadores que aspiran la reelección y no tienen obra. Y aún hay bolsas que creen que algo les tocará del botín del Ineficaz.¿Como hemos permitido que las cosas hayan llegado a este nivel de degradación? Teníamos un país que ahora muchos añoran y dejamos que los Locos Adams se lo cogieran. Es el momento de levantarnos de nuestra pasividad y gritarle al Ineficaz que ya no lo aguantamos más, porque hiede a destrucción.
http://deportes.eluniversal.com/2008/10/02/opi_art_como-lo-hemos-podi_02A2034643.shtml
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